Por Culinaria Mente
El salmón al horno con patatas y verduras es una opción ideal para quienes buscan una comida balanceada que deliciosa y fácil de preparar, combinando el omega-3 del salmón con los nutrientes de las verduras, perfecta para un almuerzo o cena.
¿Cómo preparar salmón al horno?
Con pocos ingredientes y en menos de una hora,podrás disfrutar de una comida completa y llena de sabor, asegurándote previamente de disponer los ingredientes a gusto necesarios y dejar que el horno haga el resto del trabajo.
Información nutricional
Cada ración de salmón al horno contiene aproximadamente 450 kcal, 25 g de carbohidratos, 22 g de grasas, 35 g de proteínas, 5 g de fibra, 4 g de azúcares, 90 mg de colesterol y 400 mg de sodio.
Receta de salmón con patatas y verduras
Preparación: 15 minutos
Cocción: 30 minutos
Raciones: 4 raciones
Ingredientes
- 4 filetes de salmón
- 4 patatas medianas
- 2 zanahorias
- 2 dientes de ajo
- 1 calabacín
- 1 pimiento rojo
- 1 cebolla morada
- 1 limón
- Romero fresco
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Preparación
- Precalienta el horno a 200°C. Lava y corta las patatas, zanahorias, calabacín, pimiento y cebolla en rodajas o trozos medianos. Coloca las verduras en una bandeja para horno, añade los dientes de ajo picados, un poco de aceite de oliva, sal, pimienta y mezcla bien.
- Hornea las verduras durante 15 minutos. Mientras tanto, sazona los filetes de salmón con jugo de limón, sal, pimienta y un toque de romero fresco. Retira la bandeja con las verduras, colócalas a un lado e incorpora los filetes de salmón.
- Hornea todo junto durante otros 15 minutos o hasta que el salmón esté cocido y las verduras tiernas. Sirve caliente y disfruta inmediatamente, acompañado de una copa de vino blanco.
Beneficios y propiedades
El salmón es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, los cuales son beneficiosos para la salud del corazón y el cerebro, además, es rico en proteínas de alta calidad, vitaminas D y del complejo B.
¿Sabías qué?
El salmón cambia de color debido a su alimentación, ya que adquieren su característico tono anaranjado-rosado de consumir krill y otros crustáceos ricos en astaxantina, un pigmento natural que también tiene propiedades antioxidantes.