Por Culinaria Mente
El hígado encebollado es un plato clásico latinoaméricano de raíces españolas que evoca memorias familiares y tradiciones culinarias, reconocido por su sabor intenso y la suavidad de las cebollas caramelizadas.
¿Cómo preparar hígado encebollado?
Preparar hígado encebollado es sencillo y rápido, combinando ingredientes básicos como hígado, cebollas, ajo y especias, con un toque de vino tinto y mantequilla, resaltando los sabores tradicionales.
Información nutricional
Cada ración de hígado encebollado contiene aproximadamente 290 kcal, 12 g de carbohidratos, 18 g de grasas, 20 g de proteínas, 1 g de fibra, 4 g de azúcares, 80 mg de colesterol y 280 mg de sodio.
Receta de hígado encebollado tradicional
Preparación: 10 minutos
Ccción: 20 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes
- 500 g de hígado de res o cerdo
- 2 cebollas grandes
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón
- 2 cucharadas de mantequilla
- ½ vaso de vino tinto
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Instrucciones
- Cortar el hígado en tiras uniformes y sazonar con sal y pimienta. Pelar y cortar las cebollas en rodajas finas; picar el ajo. En una sartén grande, calentar el aceite de oliva y sofreír el ajo y las cebollas hasta que estén doradas y suaves, unos 5 minutos.
- Agregar la mantequilla y mezclar bien para que las cebollas queden caramelizadas. Incorporar el hígado a la sartén y cocinar a fuego medio hasta que esté dorado, aproximadamente 5 minutos.
- Añadir el vino tinto y cocinar 3 minutos más, permitiendo que el alcohol se evapore. Ajustar los condimentos al gusto y servir el hígado encebollado inmediatamente, mientras está caliente.
Historia y origen
El hígado encebollado tiene raíces en la cocina española, que llegó a América Latina durante la colonia, muy popular particularmente en Colombia, en donde este plato se adaptó con ingredientes locales y se convirtió en un elemento básico de los almuerzos familiares.
Vitaminas y minerales
El hígado es rico en vitaminas como la A, B12 y ácido fólico, esenciales para la salud visual, la producción de glóbulos rojos y el sistema nerviosos, además, aporta minerales como hierro, zinc y cobre, que fortalecen el sistema inmunológico y mejoran la oxigenación del cuerpo.